Antes de que mi proveedor de atención médica me pusiera en contacto con Food For Thought, lo estaba haciendo todo mal.
Durante unos 15 años, no comí nada más que comida rápida. Este estilo de vida era terrible para mi salud. Tengo insuficiencia cardíaca congestiva, hipertensión pulmonar y una función renal deficiente. He luchado contra enfermedades médicas graves, así como contra la adicción a las drogas durante años y he terminado en el hospital muchas veces. La mayoría de mis médicos me han dicho que es importante comer alimentos saludables, pero eso era difícil de hacer, especialmente cuando uno es el único en la casa que intenta tomar decisiones saludables.
Llevo aproximadamente un mes en el programa de comidas adaptadas médicamente (MTM) de FFT. El programa me ha facilitado mucho mantenerme en el camino correcto. Me gustan las comidas. Saben bien y eliminan las conjeturas a la hora de elegir los alimentos.
También me gusta mucho la información educativa incluida en el
programa. FFT ofrece asesoramiento nutricional individualizado y consejos para una alimentación saludable. Me gusta mucho la comida picante y a menudo le pongo unas gotas de salsa picante a mis comidas, pero muchas marcas tienen mucha sal. He aprendido que la salsa Tabasco®, que es baja en sodio, es una buena opción para añadir sabor a la comida si se sigue una dieta restringida en sodio.
También he descubierto opciones de granos saludables como la quinoa. El equipo de servicios al cliente de Food For Thought ha sido increíblemente solidario. Las primeras comidas que recibí incluían tiras de carne. Tengo algunos problemas dentales que me dificultan masticar, así que se lo hice saber a Food For Thought y empezaron a enviarme comidas que incluían carne picada y otros ingredientes blandos.
Agradezco mucho que el equipo de FFT sea tan receptivo y se preocupe por mi salud y bienestar. En tan solo un mes, he pasado de pesar 204 libras a 197 libras. No he vuelto al médico desde que empecé el programa, pero estoy empezando a sentirme mejor.
La hipertensión pulmonar dificulta la respiración y perder peso puede ayudar. Tengo un dispositivo en casa que controla mis niveles de oxígeno, y ya puedo ver una mejora. Los niveles de oxígeno son muy importantes para la salud en general, así que estoy contento de respirar mejor.
El programa MTM requiere disciplina por mi parte. Sé que no puedo caer en hábitos alimenticios poco saludables, pero con la ayuda de FFT siento que tengo apoyo y la oportunidad de aprender a tomar mejores decisiones alimentarias. También tengo una motivación personal: quiero mucho a mi hijo y quiero estar ahí para él. No quiero perderme verlo crecer.